¿Crees que ya lo has visto todo en la Costa Brava? Si este verano vuelves a Palamós o estás descubriendo la zona por primera vez, hay pequeños detalles, rincones e historias que no aparecen en todas las guías… pero que hacen que la experiencia sea mucho más especial.
Desde leyendas del pasado hasta lugares poco conocidos, aquí van cinco curiosidades que quizá no conocías (y que puedes disfrutar ahora mismo durante tu estancia en Casa Vincke Hotel):
1. La cala que parece secreta (y que no todos se atreven a visitar)
Muy cerca del núcleo urbano se esconde Cala del Morro del Vedell, una pequeña playa de difícil acceso que suele pasar desapercibida entre turistas. Rodeada de rocas, sin servicios y sin apenas cobertura, es perfecta para quienes buscan un baño en plena naturaleza sin aglomeraciones.
Ideal para una mañana tranquila o una escapada al atardecer con toalla y libro.
2. El único museo de pesca del Mediterráneo está aquí
Puede que lo hayas visto de pasada, pero el Museu de la Pesca de Palamós es único en su categoría. No solo documenta el arte de la pesca tradicional, sino que además organiza subastas en directo, salidas con pescadores y talleres para niños.
Una visita refrescante y cultural para los días nublados o como alternativa al calor del mediodía.
3. El paseo marítimo que antes fue un hospital de guerra
Pocos lo saben, pero el actual edificio del museo de la pesca fue, en su origen, un hospital militar durante la Guerra Civil. Desde su ubicación estratégica junto al puerto, se atendía a marineros y soldados. Hoy, el paseo que lo rodea guarda esa historia en silencio, mientras los turistas caminan frente a los barcos de pesca.
4. El plato local que no puedes dejar de probar (y que no es arroz)
En Palamós es típico hablar de gambas… pero si quieres ir más allá de lo evidente, busca un restaurante que prepare “suquet de peix”. Es un guiso marinero tradicional, cocinado con el pescado que sobraba tras la faena. Cada casa tiene su versión, pero todas conservan ese sabor de mar auténtico.
Perfecto para una comida o cena después de un día de playa.
5. Un mirador escondido con vistas a toda la bahía
Más allá del conocido mirador del Cap Gros, hay un rincón menos transitado: el mirador de les Pites, entre pinos y cactus, con vistas abiertas al puerto y a la bahía de Palamós. Es ideal para ver salir el sol o contemplar cómo se encienden las luces del paseo al caer la tarde.
Un lugar perfecto para desconectar en silencio.
¿Te apetece descubrir todo esto y más con tranquilidad?
Casa Vincke Hotel es el punto de partida perfecto para explorar Palamós desde un lugar especial. Un espacio con encanto, donde disfrutar del silencio, de un jardín con piscina, de desayunos con productos de proximidad y de habitaciones únicas, todas diferentes entre sí.
Aquí, cada detalle se cuida con mimo para que te sientas como en casa, con una atención cercana que transforma cualquier escapada en una experiencia inolvidable. Aprovecha nuestras promociones activas y reserva ahora tu estancia en la Costa Brava.